lunes, 30 de diciembre de 2013

Tribulus Terrestris

El Tribulus pertenece a la herboterapia tradicional. Se trata de una hierba con un alto contenido en fitosteroides, flavonoides, alcaloides, glucósidos y saponinas (furostanol). Su uso como ayuda ergogénica se debe a la supuesta capacidad de incrementar tanto la producción como la acción de la testosterona, lo que dados sus efectos anabolizantes, redundaría en un aumento de la masa muscular y de la fuerza física. 


Actualmente se promueve su utilización para incrementar la potencia sexual. incrementa ligeramente los niveles hormonales, aunque vuelven luego a su rango normal.
Algunos comparan las propiedades tónicas de T. terrestris con los efectos del ginseng, pero ambos tienen mecanismos totalmente diferentes. También se insiste que T. terrestris incrementa la testosterona porque sube la "HDGn: hormona Desencadenante de Gonadotropina" La (HDGn) que a su vez estimula la producción de LH y de hormona foliculoestimulante (acrónimo en inglés FSH). La testosterona, además de sus tres importantes funciones en
  • construcción muscular
  • aumento de la fertilidad
  • libido
Es también conocida por sus efectos positivos en la actividad de la médula ósea para la producción de los glóbulos rojos eritrocitos y del sistema inmunitario.
Se sugiere que puede ser benéfico para aquellos cuya testosterona esté en niveles inferiores a los normales, como puede ocurrir a personas con dietas hipocalóricas y/o a atletas sobreentrenados.
El activo químico en T. terrestris ha probado ser protodioscina (PTN), un pariente de la Dehidroepiandrosterona DHEA (beneficio en el control del peso corporal y en los índices de colesterol).
No se conocen efectos adversos significativos de la suplementación con T. terrestris. Sin embargo, algunos usuarios afirman molestias de estómago y diarreas, que usualmente se van, tomándolo con las comidas.

 La Agencia Mundial Anti-Doping (WADA) sitúa al Tribulus como uno de los productos que pueden ser susceptibles de llevar componentes que pueden dar positivo.
Su consumo está contraindicado en caso de patología renal, hepática, así como durante el embarazo, debido a su posible acción sobre las hormonas anabolizantes.

Las Agujetas(eternas compañeras)


El agua con azúcar o bicarbonato son dos remedios populares que sólo favorecen la hidratación, no alivian el dolor de las agujetas ni las evitan.

El dolor es uno de los síntomas específicos de las agujetas. Estas molestias aparecen generalmente en individuos no entrenados cuando comienzan a practicar algún deporte, al reintegrarse a la práctica deportiva después de un período de inactividad, al pasar de un general, se producen pasadas unas horas después del ejercicio.

Mitos y realidades

Las agujetas aparecen como consecuencia del sobreesfuerzo de la musculatura
Las agujetas son una sensación que se produce cuando se mueven los músculos, parecido a los pinchazos de unas agujas. La teoría más conocida sobre su formación es la que dice que se producen por el exceso del ácido láctico que se libera normalmente durante el ejercicio. Al enfriarse el músculo tras el entrenamiento, el ácido láctico solidifica y cristaliza, y los cristales se clavan "como agujas" en las fibras musculares. Debido al hecho de que el ejercicio hace disminuir el dolor se creía que el calor producido por el músculo hacía que los cristales se deshicieran. Una teoría muy extendida, pero falsa.
En realidad, las agujetas surgen como consecuencia del sobreesfuerzo de la musculatura, lo cual provoca micro roturas de las fibras musculares, dando lugar a la inflamación del músculo afectado. Es la propia inflamación la que provoca el dolor, que suele llegar a su punto álgido entre las 24 y 48 horas del ejercicio desmesurado. El dolor que aparece atiende a dos razones: bien porque la fibra muscular es débil y no es capaz de sostener el nivel de ejercicio, o bien porque se realiza un trabajo muscular cuando se está desentrenado y la fibra no es capaz de soportarlo.
Las zonas más afectadas por este dolor son las uniones musculares y los tendones cerca de las articulaciones, puesto que es en la zona músculo-tendinosa donde existen más fibras musculares débiles y más tensión. Las agujetas acaban con las fibras débiles, y las que consiguen aguantar la presión se hacen más fuertes.
Las agujetas son parte de un proceso de adaptación muscular, y lo único que se puede hacer para evitarlas es hacer ejercicio progresivamente. Si no se está en forma, hay que evitar que las primeras sesiones de entrenamiento o de actividad física sean muy intensas, y en general, no aumentar bruscamente la intensidad del ejercicio. Cuando un deportista baja su nivel de entrenamiento, muchas fibras musculares se atrofian, cuando comienza el entrenamiento las partes más débiles se rompen, se hace una selección de las mejores.
En el culturismo la rotura y recuperación es constantemente la base del progreso de un culturista.
Agujetas+recuperación =crecimiento muscular

domingo, 29 de diciembre de 2013

sábado, 7 de diciembre de 2013

El hierro en la dieta.




El hierro es un mineral que se encuentra en cada célula del cuerpo y se lo considera un mineral esencial debido a que se necesita para formar parte de las células sanguíneas.
El cuerpo humano necesita hierro para producir las proteínas hemoglobina y mioglobina que transportan el oxígeno. La hemoglobina se encuentra en los glóbulos rojos y la mioglobina en los músculo
El hierro también es parte de muchas proteínas en el cuerpo.



Fuentes alimenticias

Las mejores fuentes de hierro abarcan:
  •    Legumbres secas, Frutas deshidratadas, Huevos (especialmente las yemas), Cereales fortificados con hierro, Hígado, Carne roja y magra (especialmente la carne de res), Ostras, Carne de aves, carnes rojas oscuras,Salmón, Atún, Granos enteros.
Igualmente, en la carne de cordero, la carne de cerdo y en los mariscos se encuentran cantidades moderadas de hierro.
El hierro proveniente de hortalizas, frutas, granos y suplementos es más difícil de absorber. Estas fuentes abarcan:
  •    Frutas deshidratadas: ciruelas pasas, uvas pasas, albaricoques
  •    Legumbres:habas, semillas de soya (soja), arvejas (guisantes) y fríjoles secos, habichuelas.
  •    Semillas:almendras, nueces de Brasil.
  •    Verduras como: brócoli, espinaca, col rizada, coles, espárragos, hojas de diente de león.
  •    Granos enteros:trigo, mijo, avena, arroz integral.
Si se mezcla algo de carne magra, pescado o carne de aves con legumbres o verduras de hojas oscuras en una comida, se puede mejorar hasta tres veces la absorción de hierro de fuentes vegetales. Los alimentos ricos en vitamina C también aumentan la absorción de hierro.
Algunos alimentos reducen la absorción de hierro: por ejemplo, los tipos comerciales de té negro o té pekoe contienen sustancias que se fijan al hierro de tal manera que el cuerpo no lo puede utilizar.

Efectos secundarios

El cuerpo humano almacena algo de hierro para reemplazar el que se pierde. Sin embargo, los niveles bajos de este elemento durante un período de tiempo prolongado pueden llevar a que se presente anemia ferropénica. Los síntomas abarcan falta de energía, dificultad para respirar, dolor de cabeza, irritabilidad, vértigo o pérdida de peso. Para mayor información sobre esta afección, ver el artículo anemia ferropénica.
Las personas que están en peligro de tener niveles bajos de hierro son, entre otras:
  •     Mujeres menstruantes, en especial si tienen períodos menstruales profusos
  •     Mujeres embarazadas o que acaban de tener un bebé
  •     Atletas de grandes distancias
  •     Vegetarianos estrictos
  •     Personas con cualquier tipo de sangrado en los intestinos (por ejemplo, una úlcera sangrante)
  •     Personas que donan sangre frecuentemente
  •     Personas con afecciones gastrointestinales que les dificultan la absorción de nutrientes de los alimentos
Los bebés y niños pequeños están en riesgo de presentar niveles de hierro bajos si no reciben los alimentos apropiados. Los bebés que pasan a ingerir alimentos sólidos, deben consumir alimentos ricos en hierro. Los bebés por lo general nacen con suficiente hierro que dura aproximadamente 6 meses y las necesidades adicionales de hierro se satisfacen con leche materna; por esta razón, a los bebés que no son amamantados se les debe suministrar suplementos de hierro o leche de fórmula para bebés fortificada con hierro.
Los niños entre 1 y 4 años de edad crecen rápidamente, lo cual consume el hierro del cuerpo. A estos niños se les deben suministrar suplementos de hierro o alimentos fortificados con este elemento. Nota: la leche es una fuente muy pobre de hierro y los niños que la beben en grandes cantidades evitando otros alimentos pueden desarrollar "anemia por leche". El consumo de leche recomendado es de 2 a 3 tazas por día para niños que están comenzando a caminar.
Los adolescentes son más propensos a presentar bajos niveles de hierro debido a las tasas rápidas de crecimiento y los hábitos alimentarios incongruentes.
DEMASIADO HIERRO
El trastorno genético llamado hemocromatosis afecta la capacidad del cuerpo para controlar la cantidad de hierro absorbido, lo cual lleva a la presencia de demasiada cantidad de este elemento en el cuerpo. El tratamiento consiste en una dieta baja en hierro, ningún suplemento de este elemento y la flebotomía (extracción de sangre) realizada en forma regular.
Es improbable que una persona tome demasiado hierro. Sin embargo, los niños algunas veces pueden desarrollar intoxicación por hierro al ingerir demasiados suplementos de este elemento. Los síntomas de esta intoxicación abarcan:
  •     Fatiga,Anorexia,Vértigo,Náuseas,Vómitos,Dolor de cabeza,Pérdida de peso, Dificultad respiratoria,Coloración grisácea de la piel.

Recomendaciones

Bebés y niños:
  •     Menores de 6 meses: 0.27 miligramos por día (mg/día)
  •     De 7 meses a 1 año: 11 mg/día
  •     De 1 a 3 años: 7 mg/día
  •     De 4 a 8 años: 10 mg/día
Hombres:
  •     De 9 a 13 años: 8 mg/día
  •     de 14 a 18 años: 11 mg/día
  •     de 19 o más: 8 mg/día
Mujeres:
  •     De 9 a 13 años: 8 mg/día
  •     De 14 a 18 años: 15 mg/día
  •     De 19 a 50 años: 18 mg/día
  •     De 51 años o más: 8 mg/día
Las mujeres que están embarazadas o produciendo leche materna pueden necesitar cantidades diferentes de hierro. Se recomienda preguntarle al médico sobre lo que es apropiado en cada caso particular.

Culturismo global en pruebas deplegable